
El presidente Gustavo Petro decidió cambiar su decisión de viajar mañana viernes, 25 de abril, a la ciudad de Roma para asistir a los actos ceremoniales que se llevarán a cabo en la Santa Sede tras el fallecimiento del papa Francisco.
En cuestión de aproximadamente tres horas dio a conocer que reversó su viaje por una recomendación médica. De hecho, el mandatario ya había cancelado su agenda de este viernes en Yopal, Casanare.
"Quería ir a Roma, a la gran Ciudad del Vaticano, pero el médico me dijo que no; no puedo hacer un vuelo de tantas horas", dijo.
El presidente Gustavo Petro aseguró que, aunque quería asistir al funeral del papa Francisco, no podrá hacerlo por recomendación médica. "Quería ir a Roma, a la gran Ciudad del Vaticano, pero el médico me dijo que no; no puedo hacer un vuelo de tantas horas", dijo. pic.twitter.com/l1yuOMUZKD
— BluRadio Colombia (@BluRadioCo) April 24, 2025
Vale recordar que esta semana, después de la transmisión del consejo de ministros por televisión, se conoció que el
presidente Petro se realizó un lifting facial,
un procedimiento médico que consiste en estirar la piel para reducir las
arrugas de la cara.
El mensaje de Petro por la muerte del papa
El mandatario ya había lamentado la muerte de "su gran amigo" y expresó que se "sentía solo".

El papa falleció el lunes 21 de abril a los 88 años en su residencia de la Casa Santa Marta, en el Vaticano, tras más de dos meses con serios problemas respiratorios.
Francisco visitó Colombia en septiembre de 2017 en un viaje pastoral por la paz y la reconciliación del país que en ese momento discutía la viabilidad del acuerdo de paz con la guerrilla de las Farc firmado un año antes.

En esa ocasión, el pontífice visitó Bogotá, Medellín, Villavicencio y Cartagena de Indias.
En Villavicencio presidió el 'Gran encuentro de oración por la reconciliación nacional' y recibió la imagen del Cristo Negro de Bojayá, destruido el 2 de mayo de 2002 en un bombardeo de las Farc que mató a cerca de un centenar de personas cuando una bomba cayó en la iglesia en la que los habitantes de ese pueblo del Chocó habían buscado refugio durante un combate de la guerrilla y los paramilitares.
En Villavicencio también presidió la beatificación solemne del obispo Jesús Emilio Jaramillo Monsalve y del sacerdote Pedro María Ramírez, dos víctimas de la violencia política en Colombia.